Colaboraciones

Las alas de Frida

“Pies, para qué los quiero si tengo alas para volar”

Frida Kahlo

Cambiando un poco el sentido del epígrafe, me gusta pensar que las alas a las que se refería Frida Kahlo, son las de un avión.

Desde mi perspectiva, el viajar definitivamente me ha dado alas, pues la sensación que vive en mí desde que experimenté el conocer otros lugares es la de: puedo y soy capaz de ir a donde yo quiera, probablemente me hace sentido esto, pues desde que me fueron amputadas las piernas, de cierto modo (físico y psicológico) perdí el principal medio de transporte de una persona.

Esta experiencia si bien no ha sido del todo color de rosa, ha sido de crecimiento a largo plazo, el pintor Eduardo Cohen lo describe mejor que yo en el texto de “la experiencia frente a lo nuevo”. Cohen habla del cambio como una “crisis” que es experimentada como posible ansiedad ¿quienes viajamos para conocer lugares “nuevos”, gente diferente? ¿A caso estamos buscando una crisis que sacuda nuestro mundo rutinario?

¿Por qué es tan atractiva la idea de dejar todo y viajar? En pocas palabras Cohen dice que “la experiencia auténtica de lo nuevo se asemeja a un tablero de ajedrez, cuando una pieza ha sido movida ninguna de nuestras consideraciones pensadas antes de este último movimiento son ya útiles”. Cuando regresamos de algún lugar nuevo, hay cierta reconfiguración en nuestra forma de ver el mundo, no en el mundo en sí mismo, sino en nosotros, no volvemos a ser los mismos, pues al cambiar yo, cambia mi mundo.

Lo anterior, solo ocurre cuando realmente estamos dispuestos a dejar nuestros puntos de referencia atrás, a soltar un poco de lo que éramos para descubrir lo que podemos y queremos llegar a ser. Dependiendo de la persona, resulta para algunos (me incluyo), poco divertido, porque implica aceptar y construir una nueva realidad. De nada me serviría fingir que no tiene ningún impacto la falta de mis piernas en mi vida, por eso en cierta medida no me gusta expresar un optimismo carente de sentido de crecimiento por medio del esfuerzo, el fin de compartir este texto no es el de decirte que “todo es posible” sino el de que “todo es posible, en la medida que estes dispuesto a aceptar nuevas formas y estilos de vida” Es fundamental el desaprender para aprender de lo que nos rodea.

Díganme si no una forma casi ideal de aprender a ser la mejor versión de nosotros mismos es viajando, he experimentado que se puede andar no solo con un par de piernas, sino con un par de alas, las cuales estarán simbolizadas de diferente forma para cada quien y con las cuales estoy convencida, cada uno de nosotros podemos volar.