Por: Mireya Casanova
Me llamo Mireya Casanova y quisiera hablarles sobre mi pasión por Asia, la cual empezó como una curiosidad por esta cultura que surgió desde mi infancia.
Ahora soy fan de toda la onda K-Pop y dramas coreanos, los cuales descubrí a través de documentales e información por medio de internet; y obviamente, jamás, ni por remota idea, pensé que pisaría ese suelo tan lejano. Pero Alan y sus vídeos me dieron esa patada que me impulsó a ahorrar durante 2 años y conseguir pagar mi viaje.
Recibí muchas críticas por el destino que había elegido para realizar mi primer viaje a otro país, ¡Seúl! Un “estás loca”, “tú y tus chinos” y hasta “es muy peligroso viajar para una mujer”, fueron algunas de las frases que me tocó escuchar por varios días. Que no los tomé a mal, al contrario, creo que demostraban el amor y la preocupación que tenían por mí, por un viaje tan largo y sobretodo porque yo no había salido del país. Aún así, me fui y tuve la dicha de compartir esta aventura con dos amigas, igual de locas que yo, también tenían el mismo sueño.
Ver cada palacio, la universidad más antigua de Corea del Sur, Sungkyunkwan, el templo Bongeunsa, que realmente superó mis expectativas, y caminar por esas calles, que sólo conocía a través de películas y dramas, fue increíble. También tuve la suerte de poder ver a mi amiga coreana, y me traje montones de risas y aventuras que tuvimos al conocer su país.
Todo esto se convirtió en la experiencia más maravillosa que he tenido en mi vida y la cual ya está grabada en mi mente y durará para siempre.
Mis amigas y yo aprendimos que convivir 24 horas es complicado, pero no imposible, este viaje reforzó nuestra amistad. Regresamos siendo más amigas que antes y con la promesa de viajar otra vez juntas, y ¿por qué no?, regresar a conocer el resto de Corea del Sur.
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