1.- ¡Los canadienses son la mera onda!
Pocas nacionalidades son tan buena onda como los canadienses. He visitado en cuatro ocasiones este país y siempre me llevo una gran impresión de su gente, no importa la provincia a la que vayas. Cuando menos te lo esperas, alguien inicia una conversación o te recomienda algún lugar. Entre más pequeña la ciudad más amigables son sus habitantes.
2.- Los festivales
No importa la época del año, siempre hay algún festival andando por ahí, varios de ellos de fama internacional como el excepcional Festival de Jazz de Montreal o el Carnaval de Invierno de Quebec. Los canadienses se toman en serio las celebraciones y el ambiente es familiar y mega seguro.
3.- El Poutine
Todo mexicano sabe que no hay mejor forma para coronar una noche de fiesta que comiendo unos tacos en la madrugada. En ese sentido, todo canadiense sabe que el “Poutine” sirve para el mismo propósito. Papas fritas con queso fresco y una salsa agridulce hacen que este platillo sepa mucho mejor de lo que se ve.
4.- Cirque du Soleil
El Cirque du Soleil es probablemente la compañía de circo más famosa del mundo y nació en Canadá. Tiene sus headquarters en Montreal y una vez al año abren sus puertas a los visitantes. Cada verano (algunos años son excepciones) estrenan un nuevo show que se va de gira por las principales ciudades de Canadá y USA antes de partir al resto del mundo.
5.- La ciudad de Quebec
Esta es para mi la ciudad más bella de todo Canadá, es como un cuento. Un pedacito de Francia en Norteamérica. No importa la época del año en que vayan, Quebec Ville siempre está reluciente. En invierno es especialmente fotogénica aunque con temperaturas extremadamente bajas.
6.- The Canadian
En mi primer viaje a Canadá tuve la oportunidad de hacer un viaje en tren que atraviesa todo el país desde Vancouver hasta Toronto. Un viaje espectacular y muy cómodo. La parte más bella es atravesando las rocosas canadienses con paisajes que roban el aliento y que puedes disfrutar en el espectacular vagón panorámico de cristal. El trayecto sin parar dura tres días y medio, pero lo ideal es pararse en las principales ciudades para conocer y subirte de nuevo un par de días después.
7.- Niágara
Son muy famosas y con un entorno turístico de mal gusto, pero…. son espectaculares. Las Catarátas del Niágara roban el aliento, incluso a aquellos que se desilusionan al haberlas imaginado más grandes (misma historia que la Mona Lisa) La gran caída de agua en forma de herradura es de esos sitios que no te cansas de ver, y si te llegaras a cansar, la zona tiene mucho que ofrecer, desde viñedos hasta el encantador pueblo de Niágara on the Lake.
8.- La estampida de Calgary
Esta es una asignatura pendiente que tengo con Canadá. Todo mundo habla maravillas de esta fiesta de vaqueros. Miles de personas acuden de todo el mundo para disfrutarla. Se celebra en el verano en la ciudad con el mismo nombre
9.- Auroras Boreales
Canadá es uno de los mejores lugares para disfrutar de este espectáculo natural. La temporada de Auroras Boreales es el otoño, invierno y principios de la primavera. Pueden verse en varias partes del país. Hay que ir preparado para el frío y a esperar a que la naturaleza se luzca en el cielo.
10.- Osos polares
Aunque no es una actividad económica, pues solo puede realizarse dos meses al año, y su ubicación es bastante remota, el avistamiento de osos polares en su hábitat natural en Churchill es el mejor del mundo en su tipo. Se hace a bordo de unos autobuses militares que avanzan sobre el glaciar y en una visita exitosa pueden verse en promedio 40.
¡Canadá tiene muchísimo que ofrecer! Por esa razón es uno de mis países favoritos.
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4.5
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3.5